Caminamos con mi amiga Edith. Me confiesa: "Pasa algo bastante increíble con Manu (su hijo). Se siente de una clase social inferior ante nosotros, ante su papá y ante mí, Daniela y Seba (otros hijos). Todos sus amigos son los negritos de la escuela, y viene y nos trata como con respeto, como si fuera el hijo de la señora que viene a limpiar. Yo llegué a sentir algo así con mi abuela, que vivía en Rosario y a quien no veía nunca, y era una vieja estirada, pero ¿con nosotros?..."
No hay comentarios:
Publicar un comentario