No he descubierto entre mis amigos fans de la película
American Hustle, y me extraña sentirme solo en el placer enorme que me da,
porque creería que serían muchos quienes compartirían conmigo lo que me gusta
de ella, las actuaciones, la ambientación de época y sobre todo algo que me
dijo ayer Verónica Georges.
Yo le estaba diciendo que cada signo chino tiene una lógica
propia, una racionalidad, un funcionamiento que no es traducible, ni siquiera
comprensible desde el de cualquier otro de los animales.
"Es lo mismo que con la danza folclórica, de cualquier
pueblo. Quien baila bien es quien comprende la cadencia".
"¿El ritmo."
"No".
"El compás?"
"No, no, la cadencia".
"¿Qué es, entonces?"
"No lo comprendés con la razón, sino con el cuerpo,
bailando".
La mejor expresión de este punto en American Hustle es la
conjunción perfecta de temas musicales de los años 70, la trama y el ritmo de
la película. Es una perfección tal que nada se puede decir.
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