martes, 9 de enero de 2024

Cuando despierta

 En El príncipe de las tinieblas aparece Satanás.

Había una orden religiosa, cristiana pero heredera de una secta anterior a Cristo, dedicada a velar hasta que apareciera. Era la Hermandad del Sueño.

La llegada es anticipada por una serie de fenómenos que al principio son sólo extraños —demasiadas moscas reunidas en un lugar, los perros comportándose de modo inusual—, pero luego esto avanza y comienzan a alterarse las leyes de la naturaleza.

Esas transformaciones están presentadas de forma un poco burdas, de la manera espectacular que lo requiere Hollywood.

Un director que no fuera norteamericano (y me parece que lo hubo) hubiera insinuado, en vez de exhibir, las alteraciones. Por ejemplo, el público se hubiera sentido confundido, luego mareado y habría sentido náuseas si lo que sucediera es que la relación entre las cosas se alterara. Si los actos no tuvieran consecuencia, o si la conexión entre causas y efectos fuera insensata.


No hay comentarios:

Publicar un comentario