Hoy murió el criminal Videla. Con su esposa, Alicia Raquel Hartridge, tuvieron siete hijos.
El tercero, Alejandro, era retrasado mental. Junto a otros, el chico recibió la
caridad de las monjas de la Congregación de Hermanas de las Misiones Extranjeras.
Entre ellas estaban Renée Léonie Duquet y Alice Domon.
Léonie Duquet hacía tareas de caridad junto al primo hermano
de la mujer de Videla, el padre Ismael Calcagno, a cargo de la Casa de
Catequesis de Morón.
Videla integraba el Movimiento Familiar Cristiano del
obispado de Morón.
Para tratar a su hijo Videla pidió el traslado a los Estados
Unidos. Allí Renée Léonie Duquet y Alice Domon cuidaron al chico personalmente.
Dejaron de verse cuando los Videla regresaron a la
Argentina. En 1964 internaron a su hijo en la colonia Montes de Oca en Torres y
en 1971 murió.
El 14 de diciembre de 1977 el secretario general de la
Presidencia le informó a Videla, presidente de facto, que Renée Léonie Duquet y
Alice Domon habían sido secuestradas por un grupo de tareas de la Esma, junto
con la fundadora de Madres de Plaza de Mayo, Azucena Villafor y Esther
Ballestrino de Careaga y otros familiares de desaparecidos que se reunían en la
Iglesia de la Santa Cruz.
“Procedan”, dijo Videla: en la ESMA fueron torturadas y
cuatro días después, cargadas en un avión y tiradas vivas al mar. Entre el 20 y
21 de diciembre de 1977, el mar depositó en las playas de Santa Teresita varios
cadáveres que fueron enterrados como NN en el cementerio de General Lavalle.
Tres décadas después, el Equipo de Antropología Forense identificó entre los cuerpos, el de Renée Léonie Duquet.